Gracias a Dios... una nueva comida de Navidad

(poned altavoces y dadle a play)

Este blog ya ha cumplido un año; si recordáis, lo iniciamos (mil gracias, Jose) prácticamente con la comida de Navidad del año pasado (aquí).

En este año que ha pasado ha habido de todo (en su gran mayoría bueno, afortunadamente) en relación con el equipo y quienes les rodeamos: altas, bajas, reuniones, victorias, derrotas, viajes, convivencia, viejas y nuevas amistades, comidas, cenas, meriendas, cumpleaños, primeras comuniones, frío, viento, calor, homenajes, piscinas, cafés, bocatas, chistes, regalos, fotos, crónicas... y sobre todo fútbol, muy buen fútbol.


En este año que ha pasado, como mínimo, los chavales han aumentado su formación como futbolistas y como personas, buenas personas; no os voy a volver a soltar un rollo de agradecimiento por todo ello como el de aquí, pero creo que lo que escribí sigue vigente, incluso aumentado.

Ojalá paséis todos unas felices fiestas, con paz y salud (porque hablar de brotes verdes es de risa), que los Reyes Magos sean prósperos, y que el año que viene por estas fechas se nos conceda escribir/leer una entrada como ésta.

Por lo que hace a la comida de hoy, todo un éxito de organización, como siempre, de Luis y Eva: un sitio perfecto. 


Además, hemos contado con la presencia de Jose A. y Diego (¡gracias por venir!), Ángel ha sido felicitado por su taitantos cumpleaños, Lali y Paco se han marcado un nuevo detalle con los chavales y, por nuestra parte, hemos contribuido a equipar al míster para las dos ruedas.